Areómetro: Tratar con cuidado - frágil; debe estar seco y limpio.
Recipiente medidor: Lo mejor es que sea de cristal; interior como mínimo 1,5 cm más ancho que el areómetro (a diferencia de «OPTIMUM», véase abajo); debe estar limpio y seco, debe estar en vertical.
Líquido de ensayo: Debe estar libre de suciedad, sin burbujas, muestra media.
Puesto de trabajo: Debe ser libre de sacudidas, luminoso y sin deslumbramientos.
Proceso de medición: Verter el líquido de ensayo lentamente en la probeta graduada. Antes de la medición mezclar cuidadosamente,
En el caso de un areómetro con termómetro incorporado y divisiones de la escala del termómetro en 0,1 o 0,2 °C, golpear con cautela ligeramente en la parte inferior, puesto que en estas aberturas capilares estrechas (especialmente en caso de temperaturas descendentes) la columna de mercurio, en parte, ya no muestra ningún desplazamiento completamente uniforme.
Agarrar el areómetro con cuidado por el extremo delgado por encima de la escala de medición (puntiagudo) y sumergirlo lentamente en el líquido hasta que flote; para ello sumergir como máximo 5 mm más hondo que la posición natural de flotación. La superficie restante del areómetro debe estar asimismo limpia y seca durante la inmersión (sin huellas de dedos, sin partes de grasa y similares).
Esperar aprox. 1 minuto, mejor 2 minutos (cuanto mayor sea la parte inferior, tanto más habrá que esperar). Leer el resultado «arriba» o «abajo» (v. areómetro) con/sin lupa; dirección visual en horizontal. Durante la medición, el areómetro debe estar en calma y flotar aprox. centralmente.
La temperatura de medición debe ser = temperatura de referencia (normalmente = 20 °C; v. areómetro). En caso de diferencia de temperatura corregir el valor de medición mediante las tablas.
Si la tensión superficial del líquido de ensayo difiere considerablemente de la tensión superficial tomada como base para el ajuste (v. areómetro), se tendrá que llevar a cabo una corrección mediante las tablas en el caso de mediciones precisas. Los areómetros están ajustados en principio para una tensión superficial determinada o para las clases de tensión superficial L (= baja), M (= media H (= alta), o para la tensión superficial de un líquido determinado.
Distancia lateral óptima respecto de la pared del cilindro: 7,5 mm o más.
Realizar siempre 2 a 3 mediciones sucesivamente y crear el valor medio.
En el caso de haber elevados requisitos para la precisión (por ejemplo, en mediciones de garantía), tendrán que emplearse areómetros calibrados (idealmente con certificado de calibración). En caso necesario también se pueden utilizar para ello tanto dispositivos contrastables como normales respectivamente (con certificado de verificación oficial o del fabricante). En el caso de areómetros normales sin certificado de verificación se tendrá que contar con imprecisiones de medición más o menos grandes.